Ella es Raquel B. Cunampio,  del grupo Ejua Wãdrã, “Guardianes de la madre tierra”, de la comunidad de Piriatí Emberá, en la Provincia de Panamá Este. Es presidenta de este grupo de jóvenes que han decidido abordar los problemas ambientales de su comunidad de la mano de la cultura. El grupo se ha propuesto recuperar los bosques que son parte fundamental de su historia indígena emberá pero que nunca pudieron conocer, para lo cual se han aliado con una empresa social experta en reforestación y están en camino de especializarse en especies forestales, viveros y producción de bosques.

Con sus 32 años y desde su sabiduría, Raquel nos enseña del compromiso que su comunidad  y su grupo sostienen con el cuidado del entorno y las buenas prácticas ambientales. Está terminando una carrera técnica forestal en la Universidad de Panamá en Darién.  En una entrevista nos cuenta que la relación entre el bosque y la cultura emberá es muy estrecha, por lo que trabajar en la recuperación del bosque es al mismo tiempo trabajar en salvaguardar la cultura del pueblo emberá. De ahí que nos invita a la acción: “ha llegado el momento en que decidamos hacer cambios significativos desde el lugar donde estamos y definir el rumbo de la historia para los seres humanos y del lugar donde vivimos”.