El liderazgo indígena en temas ambientales se ve reflejado en la creación de reglamentos internos y resoluciones locales comunitarias para la protección de los recursos naturales de su territorio colectivo y comarcal y para regular su uso. El PPD ha apoyado la iniciativa de la comunidad de Mach Pobor, en la Comarca Emberá Wounaan, quienes junto a la Fundación Naturaleza y Ciencia 507 y a pedido de la comunidad, han generado un reglamento para la conservación de la flora y fauna para conservar las áreas de anidación del águila harpía y águila crestada en la zona. La Resolución 08 del 15 de junio de 2018 fue el resultado del trabajo de la fundación durante 3 años para frenar el avance de la frontera agrícola y prevenir la extracción de árboles y la cacería, encontrando alternativas económicas como el turismo y el planificar las fincas en función de la conservación. Como resultado, la comunidad ha decidido sellar el compromiso y han acordado dejar 500 metros alrededor de cada uno de los 5 nidos cercanos a la comunidad como protección absoluta. Se buscará replicar este modelo en las comunidades vecinas de Alto Playona, Sinaí y Canaan. 

Por otro lado, la comunidad de Puerto Lara, territorio colectivo en Darién, se ha propuesto reglamentar lo que han estado trabajando durante dos años en conjunto con Native Future y PPD a través de la Fundación para el Desarrollo del Pueblo Wounaan. Incorporarán a su ya existente Reglamento Interno la conservación de sus recursos prohibiendo la deforestación e impulsando el cuidado del bosque y la restauración de áreas afectadas. El bosque permite realizar sus artesanías, el acceso y cuidado de los ríos. También, se va a reglamentar el turismo en la comunidad y el avistamiento de aves para así asegurar su conservación, penalizando su venta o matanza. Este reglamento se replicará en las comunidades de Panamá Este, Río Hondo y Platanares. Las estructuras de gobernanza tradicional indígena han permitido la creación de estos reglamentos por petición de las comunidades.

Foto izquierda: crédito a Fundación para el Desarrollo del Pueblo Wounaan. 
Foto derecha: crédito a Fundación Naturaleza y Ciencia 507.